15/01/2013 Elecciones en el gremio de la carne A propósito de la intervención revolucionaria en los sindicatos y la lucha contra la burocracia El “nuevo” MAS promesas de victoria, pero siempre jalones de derrotas
Los obreros combativos que votaron por la Roja, como decíamos antes, lo hicieron bajo la ilusión que así podrían derrotar a la burocracia. Por eso en 9 frigoríficos (contando Paty) ganó el voto contra la burocracia, lo que demuestra que junto a esa franja de de obreros combativos existía la posibilidad de preparar las condiciones para derrotar a la burocracia en las calles. Desgraciadamente, la vía electoralista del “nuevo” MAS impidió que esta perspectiva se desarrolle. Como vamos a demostrar a lo largo de esta nota, en estas elecciones sindicales a la vanguardia combativa de los obreros de la carne se le plantearon dos alternativas: la política de la izquierda reformista, es decir del “nuevo” MAS, y la política del trotskismo encarnada en los obreros de Paty.
Luego del fraude electoral… Los dirigentes del “nuevo” MAS dicen que en estas elecciones “la gran irregularidad de los comicios fue que en la empresa Paty no se pudieron llevar a cabo las elecciones, no se puso ni la urna, impidiéndole el derecho democrático a más de 170 trabajadores afiliados” (Socialismo o Barbarie N°240, 27/12/2013). Se refieren a que en asambleas de base los obreros de Paty por unanimidad y a mano alzada juraron no dejar entrar las urnas, porque en las elecciones de Molina y La Roja no tenían derecho a votar el 50% de los compañeros del gremio, pues estos no figuran en los padrones de la burocracia y el Ministerio de Trabajo. Los obreros combativos que en estas elecciones buscaban derrotar a la burocracia deben saber, que los dirigentes de la Roja, culpan a los combativos y aguerridos obreros de Paty, cuando son los jefes de la Roja quienes ni siquiera en los frigoríficos donde tienen delegados o cierta representatividad no garantizaron que voten todos los compañeros. Por ejemplo, en Ecocarnes, donde el nuevo MAS y la Roja tienen un delegado, solo votaron 140 de los cerca de 400 obreros que hay en la planta. En Rioplatense no pudieron votar 190 compañeros por no estar en los padrones que la Roja “depuro”. ¿Por qué los dirigentes de la Roja no garantizaron que voten estos compañeros? Porque no quieren de verdad enfrentar a la burocracia, con la cual tienen un gran acuerdo que es aislar a los obreros concientes de Paty de la combativa base del gremio, que cada vez que salió a la lucha con sus acciones trazó un ángulo de 180° grados con las falsas promesas de victorias que hacia los dirigentes de la Roja. El “nuevo” MAS al citar como “irregular” a los que luchan por la democracia de los trabajadores, deciden todo en asamblea, votan a mano alzada y rompen con los estatutos y cuerpos orgánicos de la burocracia, les está diciendo a los trabajadores combativos que lo “regular” son las mediaciones en el Ministerio de Trabajo, la injerencia del estado patronal en nuestras organizaciones, la burocracia de Molina y sus barrabravas y las elecciones fraudulentas; es decir a todos los que los obreros de Paty de forma valiente –“irregular” para el “nuevo” MAS- llamaron a derrotar.
Los obreros de Paty tenían y tienen razón. El fraude se dio, tal cual lo vaticinaron los compañeros. Son los dirigentes de la Roja y del “nuevo” MAS quienes deben explicar a la base a la cual llevaron a una nueva derrota, el por qué le dieron la espalda a luchar como lo proclamaron los obreros de Paty. Quienes en un volante del 5 de septiembre del 2012, manifestaban al respecto: “Sabemos que hay muchos trabajadores del gremio que tienen ilusiones en que en estas elecciones se puede derrotar a Molina, a ellos le decimos: si la lista Roja realmente quiere derrotar a Molina y compañía, con los 150 votos de Paty no alcanzan, pues en este fraude solo votan 3.000 de los 7.000 trabajadores del gremio. Por eso decimos, que si la lista Roja realmente quiere ganar los llamamos a que impulsemos juntos que voten todos los trabajadores del gremio. Que voten los 3.500 trabajadores que Molina no va a dejar votar. ¡Ellos también son trabajadores de la carne!
Le dieron la espalda a esta convocatoria, que era una verdadera solución para que la base obrera enfrente y derrote el fraude y se saque de encima a los traidores, porque para el “nuevo” MAS lo “regular” es borrar padrones en el Ministerio de Trabajo, es contar votos con la barrabrava de Chacarita al lado de las urnas, es acatar la disciplina de la ley patronal de “Asociaciones Profesionales” que rige y moldea los reglamentos de los sindicatos. Desde aquí se puede notar que el argumento del “nuevo” MAS de que la “GRAN IRREGULARIDAD” FUE QUE NO SE VOTO EN PATY y no el fraude del Ministerio de Trabajo, Molina y el accionar de la barrabrava de Chacarita, ubica al “nuevo” MAS en un frente con la burguesía, el gobierno de la Kirchner y el estado, para buscar vencer a los obreros que llaman sublevarse contra la burocracia y conquistar la verdadera independencia de clase. Sobran las palabras…
Las mentiras del “nuevo” MAS, que disimulan la política conciliadora de la dirección de ese partido En la misma declaración los dirigentes del “nuevo” MAS, entregan varias ofrendas más a su caudal de mentiras. Afirman que los obreros de Paty solo llamaron a hacer un “boicot activo en una sola planta”. No es así, el 25/8 los obreros de Paty decían: “Los trabajadores de la carne, hartos de cierres, despidos, y despidos encubiertos con los retiros voluntarios, como el CPC y salarios de hambre por la falta de trabajo, debemos ponernos de pie y enfrentar a la patronal y a la burocracia, ¡Asambleas de base en todos los frigoríficos donde dirige la oposición para votar que vamos a derrotar el fraude como hicimos en la asamblea de Paty!” Por otro lado, en otros de sus embusteros capítulos, el “nuevo” MAS dice que en Paty “la posición fue no dar ninguna pelea al fraude concreto y real, porque si hubiese sido consecuente con su posición tendría que haber parado la elección en todo el gremio, cosa que ni se le ocurrió plantear y menos realizar”. A confesión de parte relevo de pruebas. “Frenar” las elecciones para el MAS era pedir su cese en el Ministerio de Trabajo. Esto significa seguir entrometiendo al estado de los patrones en los asuntos de los trabajadores. Pasa que el MAS tiene la misma tesis de la socialdemocracia alemana del siglo XIX, que de la mano de su dirigente Berstein proclamaba la teoría reformista sobre el estado afirmando que este “es un saco vacio que puede llenarse de cualquier contenido”. Nada más falso, pues para el marxismo el estado –en este caso burgués- es la herramienta de dominio de una clase sobre otra. Esta “equivocada” concepción lleva a los dirigentes del “nuevo” MAS a sostener en todo momento una típica política de colaboración de clases, es decir enemiga de la independencia “concreta y real” de los trabajadores expresada en la puesta en pie de sus propias instituciones de lucha. El 29/10 los trabajadores de Paty se pronunciaban al respecto: “denunciamos el fraude y todo intento de intervención por parte del Ministerio de Trabajo y de las tres listas que hoy lejos de plantear un camino de lucha impiden que los trabajadores salgan a pelear por nuestras demandas formando de hecho un cogobierno en el gremio” monitoreado desde las oficinas del ministro Tomada.
El MAS echa culpa sobre los obreros de Paty para tirar tierra en los ojos de aquellos obreros -que votaron por la Roja en pos de infligirle una derrota a la burocracia- y disimular así que su política fue un rotundo fracaso para enfrentar el fraude y barrer al traidor Molina.
A los hechos nos remitimos. Sucedió lo que los obreros de Paty anunciaron con muchísima anticipación. Molina “ganó” gracias a la política cómplice de los dirigentes de la Roja, el MAS y Opinión Socialista y el apoyo del FIT.
“Votar o votar, esa es la cuestión”: el cretinismo electoralista y sindicalista, Los dirigentes del “nuevo” MAS le recriminan a los obreros de Paty “por qué intervinieron en las elecciones del 2008 y no en las del 2012”. Lo electoralistas del “nuevo” MAS, no entienden que votar o participar de elecciones (sean presidenciales, parlamentarias o sindicales), es táctico. Pues estamos hablando de una “democracia” indirecta, para nada “democrática”, como lo es meter de forma individual un voto en las urnas, que como todo sufragio universal, tal cual decía Engels (fundador, junto a Marx, del socialismo científico), es un “instrumento de dominación de la burguesía”. (Lenin, “Estado y Revolución”, 1917). En las elecciones del 2008, los obreros de Paty utilizaron esa tribuna para explicar pacientemente y educar a la vanguardia de cómo se implementa la política revolucionaria al interior de los sindicatos para barrer a la burocracia, a la cual se la derrota en las calles y no en elecciones. Ese día, “irregular” por cierto, fue que en la planta de Martínez se conquisto, con asambleas de base y piquetes, que votarán todos. Se colocó urna propia, donde afiliados y no afiliados emitieron su elección. La gran anécdota de aquella jornada fue que a dicha urna los fiscales del “nuevo” MAS, por orden de su abogado, se negaron a reconocer.
Se interviene o no en las elecciones según las condiciones objetivas, así como a veces se interviene en las elecciones presidenciales para hacer propaganda del programa revolucionario y desarrollar la lucha extraparlamentaria de masas, en otras ocasiones cuando hay procesos de lucha se llama a boicotearlas. Contrario a esto, la política del MAS siempre es votar o votar, sometiéndose a los estatutos, cuerpos orgánicos y también a los plebiscitos de la burocracia -ya sea llamando a votar por “SI” o por “NO”-, ha permitido que la burocracia de Wasiejko y de la CTA avancen sobre la conquista que significó para los obreros de Fate y el neumático haber recuperado la Seccional San Fernando del SUTNA. Los dirigentes del “nuevo” MAS, le ocultan a la vanguardia de los obreros de la carne que los trabajadores de FATE en el 2007 primero echaron a la burocracia a patadas y trompadas. Un piquete acorraló y casi prende fuego el edificio de la Seccional San Fernando con los burócratas adentro. Después de esta magnífica y ejemplar lucha, donde la burocracia y sus matones fueron vapuleados en las calles: ganar las elecciones fue un trámite. Claro está que esta política, de piquete y de infligirle una derrota física a la burocracia, jamás fue una decisión de los dirigentes del “nuevo” MAS; por el contrario, ellos, ante la sublevación de la base obrera, enseguida llamaron a que intervenga la dirección nacional del CTA y el Ministerio de Trabajo para regularizar el funcionamiento de la seccional San Fernando del Sindicato de los Trabajadores del neumático. Esta lección, quiere ser enterrada por dirigentes del “nuevo” MAS, por ello han venido sometiendo a los obreros del neumático a los cuerpos orgánicos y podridos estatutos del sindicato y a las conciliaciones obligatorias del Ministerio de Trabajo. No podemos olvidar que en la lucha del 2008, el resultado de las peleas “concretas y reales” de los dirigentes del MAS en el Ministerio de Trabajo, donde ellos mismos exigieron la convocatoria de la conciliación obligatoria, dividió a la base de Fate, Pirelli y Firestone y permitió así que la patronal se alce con el despido selectivo de 200 activistas y obreros combativos del gremio del neumático. Aún hoy se siguen pagando las consecuencias de tamaña derrota.
Los obreros trotskistas afirmamos que luchar por conquistar y defender la democracia de los trabajadores es una posición de principio, porque en las asambleas de base respiran los trabajadores y no en las urnas de Molina, Tomada y el “nuevo” MAS.
El pacifismo del “nuevo” MAS: como llevar a los trabajadores a una tragedia
Dice el “nuevo” MAS: “el principal enemigo son los obreros revolucionarios de Paty”, perdón… los “irregulares”, y no los barrabravas de Chacarita que llevó Polonio (un esbirro de la burocracia) para defender las urnas de Molina y Tomada.
Pero más allá de las hipótesis ¿en verdad los dirigentes del “nuevo” MAS querían ganar las elecciones sin hacer piquetes, coordinadoras y organizar una marcha obrera al sindicato para enfrentar a los pistoleros de Molina? ¿Creen que estamos ante unas elecciones a centro de estudiantes? “¡Sí!”, dicen los dirigentes del “nuevo” MAS mientras borran padrones en el Ministerio de Trabajo y cuentan votos con la barra de Chacarita al lado.
Son los dirigentes del “nuevo” MAS los que deben explicar por qué no llamaron a poner en pie un gran piquete obrero de todos los frigoríficos donde tiene peso la oposición para sacar de nuestro sindicatos a esa banda de lúmpenes y matones que lo usurpa. ¿En qué planeta viven los dirigentes del MAS? La burocracia se define por dinero, prebendas y privilegios; no por ideología. Están con el patrón que les paga. Su trabajo es cuidarles los intereses a los capitalistas y lo hacen a los tiros. Ejemplos hay miles, pero el “nuevo” MAS le oculta esta verdad a los obreros. La burocracia envía a sus pistoleros para quebrar cada una de nuestras luchas, molernos a palo, mandarnos al hospital o directamente asesinarnos como lo hizo la criminal burocracia de la Unión Ferroviaria con el compañero Mariano Ferreyra. Así fue que en el Visom, una patota de 30 pistoleros de Molino garantizó los despidos de la patronal y que nadie se rebele contra ello; mientras sucedía, por no levantar la política de Comité de Autodefensa, los dirigentes de la Roja tuvieron que quedarse a varias cuadras de los acontecimientos.
Decía el Programa de Transición de los trotskistas escrito en 1938 que: “Los elementos amarillos y los gendarmes privados en las fábricas son las células fundamentales del ejército del fascismo. Los piquetes de huelgas son las células fundamentales del ejército del proletariado”.
Sin derrotar a la traidora burocracia los obreros perdemos nuestras conquistas En sus declaraciones, dice el “nuevo” MAS: “la burocracia no hace nada”, “deja que vacíen el gremio” “que haya despidos”. Pero su política es impotente para evitarlo. Por el contrario, termina siendo una catástrofe para miles de trabajadores de la carne. 15.000 compañeros quedaron en la calle (incluidos en el Rioplatense, Rumfo, etcétera), se cerraron más de 123 frigoríficos, se ha dolarizado el precio de la carne para el consumo de nuestras familias, perdimos la conquista de tener la garantía horaria al 100%, en muchas plantas solo trabajamos cuando hay faena, y cuando no… no se nos paga. Ante esta terrible situación para los obreros de la carne, el “nuevo” MAS y otros grupos, al igual que los partidos que integran el FIT, se mantienen como una oposición fiel a “su majestad” la burocracia sindical, a la cual solo “enfrentan” en elecciones fraudulentas.
Tan conciliadores son los dirigentes del “nuevo” MAS, que luego de ganar en 8 frigoríficos y la burocracia solo hacerlo en 2, quieren hacerles creer a los obreros que debemos “esperar 4 años más para echar a Molina” por culpa de “los 150 votos que Paty no les dio”. Este vil argumento es para no llamar a luchar, porque si verdaderamente quieren derrotar a Molina, hoy mismo podrían llamar a la base obrera a conquistar una asamblea general, siendo que la Roja ganó en la mayoría de los establecimientos. La burocracia no tiene ninguna legitimidad sino es por medio de este fraude electoral y por la constante negativa a luchar por parte de los dirigentes de la Roja.
El “nuevo” MAS una corriente que le da la espalda a la mayoría explotada de nuestra clase: El MAS, en su intento de polemizar con los obreros revolucionarios de Paty, a los que trata irrespetuosamente de “caudillos”, dice que el problema en el gremio “no son los obreros en negro o tercerizados” sino “los despidos y el problema de aumento salarial y de pérdida de conquista”. Esta es toda una confesión. Pero ¿cómo luchar por mejoras de salarios o contra los despidos, sin pelear contra el trabajo en negro y la precarización laboral? ¿Cómo luchar contra los despidos, cuando estos provienen en su amplia mayoría de los obreros en negro, contratados o sub ocupados? Solo una corriente que representa los intereses de la aristocracia obrera, puede decir la barbaridad que dice el “nuevo” MAS.
El “nuevo” MAS no representa a esa mayoría del gremio, por eso no llamó a luchar por que voten todos como propuso Paty. Por otro lado, no hemos visto ni una sola propuesta de lucha del “nuevo” MAS frente a los despidos. Ni siquiera por mejoras salariales, como sí lo hicieron los obreros revolucionarios de Paty, que siendo de los mejores pagos del gremio, para defender esa conquista llamaron a luchar por que todo el gremio gane igual o más que ellos, $7.000 de salario mínimo vital y móvil para todos, el pase a planta permanente a todos los trabajadores en negro y contratados y la reincorporación de todos los despedidos.
En ambos frigoríficos, Vison y Bancalari, la lista Roja -que levanta como demanda “basta de despidos”- tiene candidatos. No pueden seguir de brazos cruzados y esperar hasta el 20 de septiembre a que se realicen las elecciones. Hay que llamar a luchar ya mismo.
*Organizando una gran lucha y conquistando los organismos de democracia directa y echando a la burocracia: podremos derrotar a los traidores y realizar verdaderas elecciones limpias La vida ya dio un veredicto. Solamente una coordinadora de trabajadores de la carne, con un delegado cada 50 compañeros, donde se imponga la democracia de los trabajadores y se desconozca toda regimentación de la burocracia y la patronal, podrá garantizar elecciones limpias donde voten todos los trabajadores de la carne, los contratados, tercerizados, trabajadores en negro y despedidos, los trabajadores de las cooperativas y del ciclo dos. Como dicen los obreros de Paty en su último volante, editado el 29/12/2012 una vez consumado el fraude de la burocracia y el Ministro Tomada: “¡Basta de verso! ¡Pongamos en pie la coordinadora de trabajadores de la carne para echar a Molina y comenzar a luchar en serio!” “¡Asamblea general de todos los frigoríficos donde la Lista Roja ganó para, junto a los obreros de Paty, poner en pie la coordinadora de los trabajadores de la carne, para organizar la lucha contra la patronal y el gobierno; marchar al sindicato, echar a Molina y que nuestra organización gremial pase a manos de sus verdaderos dueños: los trabajadores!” “¡El sindicato son la mayoría de los trabajadores que están en negro, en la calle o trabajando en las cooperativas truchas del trabajo esclavo de Moreno y la Kirchner! ¡Fuera el ministerio de trabajo y la patronal de nuestras organizaciones! ¡Fuera los podridos estatutos y cuerpos orgánicos de la burocracia! ¡Abajo el descuento de las cuotas compulsivas! ¡Que los delegados pasen a cobrar la cuota sindical por los frigoríficos! ¡Que los dirigentes ganen lo mismo que en sus lugares de trabajo! ¡Que vuelvan todos a trabajar! ¡Que las comisiones internas de la oposición organicen los comités de despedidos para luchar por su reincorporación, comenzando por los 100 despedidos del Visom y del C.P.C.! ¡Basta de despidos y suspensiones! ¡Reincorporación de los despedidos del Rioplatense, del Rumfo y de los miles de compañeros del gremio!”
*¡Viva el combate revolucionario de los obreros de Paty! Para el MAS, la burocracia son algunos “padrones fantasmas” y no un problema de corrupción de dirigentes por plata y privilegio a costa de entregar la sangre obrera a la peor de la súper explotación y barbarie capitalista. De allí su posición socialdemócrata y pacifista de llamar a los obreros “enfrentar” con votos en las urnas a los revólveres de los barrabravas, quienes no hacen más que cumplir el rol de bandas proto-fascistas al servicio de mantener un terrorífico control sobre los trabajadores para resguardar la propiedad privada y los intereses de los parásitos imperialistas y la patronal esclavista. Al MAS todo lo que huele a democracia directa lo asusta, le parece extraño… “irregular”. ¿Será por qué son sus dirigentes los que quieren tomar la posta de los estatutos y cuerpos orgánicos con los que funcionan de forma “regular” los hombres de la burocracia? Muy posiblemente, así sea. Por ello, a los morenistas, como los dirigentes del “nuevo” MAS, los espanta que los obreros revolucionarios propongan organismos de lucha política que unan las filas obreras y rompan con los gobernados por los burócratas de los sindicatos y los movimientos piqueteros. La IV Internacional en 1938 decía que “los burócratas de los sindicatos se opondrán, por regla general, a la creación de comités, del mismo modo que se oponen a todo paso atrevido en el camino de la movilización de las masas”. Esta norma le cabe también a la dirección del MAS y a los dirigentes de la Lista Roja, ya que fueron concientes militantes en contra de poner en pie una coordinadora de lucha, como propusieron y lo siguen haciendo los obreros revolucionarios de Paty que todos los días militan bajo las banderas de la IV Internacional. Se ensañan contra los trabajadores de Paty por decidir y resolver sobre todos sus problemas en asambleas de base donde cada uno tiene derecho a voz y voto. Hasta los militantes del FIT y de la Roja tienen la posibilidad de expresar allí sus posiciones y convencer a todos los trabajadores de sus ideas y propuestas. Tanto es así, que un día previo a las elecciones, este militante del FIT, pidió que se revea la posición que votó la asamblea anterior de “no dejar ingresar las urnas”. Como es tradición en la planta, el compañero pudo argumentar e inducir a sus compañeros. Sin embargo no pudo persuadir a nadie. En Paty los que no tienen democracia son los alcahuetes, los burócratas, los buchones y los agentes de la patronal. En cambio, donde dirigen el FIT, el “nuevo” MAS y demás grupos políticos, los que si tienen democracia son los burócratas y los ministros, pero no los obreros revolucionarios y la base combativa. Por eso, al momento en que se conocía la fecha de estas elecciones, y existía la posibilidad de unificar a la oposición contra la burocracia, los dirigentes de la Roja se negaron a llamar desde todos los frigoríficos a una gran asamblea obrera para la base vote a mano alzada a sus candidatos, como proponían los obreros de Paty. Pero eso sí, ahora acusan de que “no tenían tiempo material para hacerlo”, porque se sometieron a los tiempos que la burocracia y el Ministerio propusieron para la presentación de conformación de las listas que se presentarían en las elecciones. ¿Qué más decir al respecto…?
El MAS reniega de las asambleas de base y de la lucha con los métodos de la clase obrera. Por esta política no pudieron impedir los cientos de despidos y pérdidas de conquista en todos los lugares donde tienen alguna influencia o dirigen. El MAS acusa de “sectario” a los obreros revolucionarios que defienden los más elementales principios de clase y la verdadera democracia de los trabajadores. ¿Estarán en contra los dirigentes del “nuevo” MAS de la votación que hicieron los obreros de Paty de parar la planta a comienzo de este año por el despido de un compañero que en 2 horas volvió a ser reincorporado? Responda. Atacan y se confabulan contra los obreros de Paty porque ellos, que integran un Comité Internacional de apoyo y solidaridad con las masas de Libia y Siria, luchan por recuperar la tradición de militancia internacionalista que era común para la clase obrera mundial en los siglos XIX y principios del XX. Luchan por retomar la tradición internacionalista vivida durante la guerra civil española en la década del ´30, donde miles de brigadistas obreros de distintas organizaciones y partes del mundo acudían en ayuda de los milicianos para enfrentar al fascismo y a su jefe Franco. Hoy los obreros de Paty, además de luchar por la unidad de las filas obreras en su país, han lanzado una campaña de ayuda y solidaridad, juntando aportes, para colaborar efectivamente con los obreros revolucionarios de Siria que resisten al genocidio perpetrado por las tropas de Al Assad, a cuenta del imperialismo. Masas explotadas de Siria a las que el FIT -quienes le dieron la orden a los dirigentes del “nuevo” MAS para que ataquen a los obreros de Paty, si es que quieren ingresar al “Frente”- ha cercado con su silencio. Pero eso no es todo. Para el “nuevo” MAS, los trabajadores pueden resolver sus problemas votando por diputados “socialistas” al parlamento burgués, presionando al Ministerio de Trabajo y la Justicia burguesa. Por eso se confiesan públicamente y con una ira profunda, como enemigos acérrimos de los obreros revolucionarios de Paty, quienes bajo el apotegma del marxismo revolucionario de que “la liberación de los trabajadores, será obra de los trabajadores mismos” plantean abiertamente al conjunto del movimiento obrero que hay que poner en pie una coordinadora de lucha, romper el control del estado sobre las organizaciones obreras, derrotar a la burocracia, y conquistar los organismos de lucha política de la vanguardia y las masas contra la patronal, el gobierno de la Kirchner y las instituciones de este régimen infame. Digamos la verdad. Los dirigentes del “nuevo” MAS les dicen a los trabajadores que los enemigos son los obreros de Paty que luchan bajo el programa y las lecciones de la IV Internacional y no… la barrabrava y los pistoleros de los sindicatos. SE TERMINÓ LA DISCUCIÓN.
Soria, Costilla y Villacorta de la Comisión de Trabajadores de PATY Julian Juarez y Emilio Gresca por el Comité Redactor de Democracia Obrera |